Ética e integridad

Política de Cumplimiento

La Política de Cumplimiento tiene como principal objetivo establecer un marco común y homogéneo de vigilancia, control y gestión de los riesgos de cumplimiento (en especial, los destinados a la prevención de conductas delictivas) y fomentar una cultura de ética empresarial en la organización y en los procesos de toma de decisiones y de formación de la voluntad de administradores, directivos y empleados. Adicionalmente, la política desarrolla las fases del Modelo de Cumplimiento implantado en la compañía y establece las competencias de los órganos de gobierno y de gestión de la misma y las de sus empleados en el ámbito del cumplimiento normativo.

Las fases en las que se estructura el Modelo de Cumplimiento son las siguientes:

• Identificación de los riesgos de cumplimiento en función de las actividades de la compañía.
• Valoración de riesgos en función de su impacto y su probabilidad de ocurrencia.
• Identificación de las medidas de vigilancia y control implantadas para evitar o mitigar la ocurrencia de los riesgos.
• Formación a los empleados y directivos de la compañía en los principios y compromisos recogidos en el Código de Ética, en la Política de Cumplimiento y las demás políticas que soportan el modelo.
• Evaluación periódica de las medidas de control para detectar posibles ineficiencias o áreas de mejora que requieran planes de acción específicos.
• Información a los órganos de gobierno de la compañía sobre el funcionamiento del Modelo de Cumplimiento y el seguimiento de los planes de acción puestos en marcha para su actualización continua.
• Comunicación, valoración e investigación de los incumplimientos detectados y aplicación de las medidas disciplinarias oportunas.
• Supervisión del modelo por un órgano independiente.

El Modelo de Cumplimiento incluye un Modelo de Prevención de Delitos destinado a prevenir o reducir significativamente los riesgos de comisión de actos delictivos, en especial, los que conlleven la responsabilidad penal de la persona jurídica, de acuerdo con la Ley Orgánica 1/2015, de reforma del Código Penal.

Política Anticorrupción

Ferrovial cuenta con una Política Anticorrupción que rige el comportamiento de todos los administradores, directivos y empleados, y de sus colaboradores, en el desarrollo del negocio, teniendo presente que se ha implantado una política de “tolerancia cero” con cualquier práctica que pueda ser calificada como corrupción o soborno, tanto activo como pasivo.

La política establece el cumplimiento de las leyes anticorrupción en todo el mundo, entre las que destacan el Código Penal español (y el del resto de jurisdicciones en las que Ferrovial trabaja), la Ley de Prácticas Corruptas Extranjeras de EE.UU., la Ley de Soborno de Reino Unido y la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción.

Formación

La formación de los empleados en los valores y principios recogidos en el Código de Ética y en la Política de Cumplimiento es uno de los ejes sobre los que se desarrolla el Modelo de Cumplimiento de la compañía. En este sentido, durante 2018 se ha puesto en marcha un plan de formación en los valores y principios que deben regir la actuación de los profesionales de Ferrovial. Igualmente, se han puesto en marcha programas de formación en materia anticorrupción selectivos en función del nivel de exposición al riesgo de determinados colectivos. En su conjunto, estos cursos fueron realizados por 4.216 empleados, con un volumen formativo de 7.456 horas.